Las fundiciones son aleaciones de hierro, carbono y otros elementos (en menor proporción) que dan como resultado materiales con diferentes propiedades mecánicas que pueden ser utilizados en diferentes industrias, siendo la industria automovilística una de las que más usos les dan.
Dependiendo de la cantidad de hierro y carbono que contengan en su composición, pueden ser de un tipo o de otro. En cualquier caso, cuentan con una larga lista de ventajas que les otorgan un sinfín de aplicaciones.
Ahora bien, aunque existen muchos tipos, los 3 tipos de fundiciones más habituales que debes conocer son las que te mostraremos a lo largo de esta entrada.
#1 Fundición blanca
Las fundiciones blancas se caracterizan por tener una elevada dureza, esto hace que sea una de las fundiciones de acero más utilizadas en el sector industrial.
Resultan de la aleación de hierro, silicio y carbono combinado en forma de cementita, y reciben este nombre porque al fracturarse dejan ver un color blanco brillante.
Con respecto a su soldabilidad, se trata de una fundición insoldable, esto es debido a que tiene baja ductilidad y no está en capacidad de absorber los esfuerzos térmicos que tienen lugar en el metal durante el procedimiento de soldadura.
#2 Fundición gris
La fundición gris, hierro colado o hierro fundido tiene múltiples aplicaciones a nivel industrial, pues, se trata de un material con buenas propiedades mecánicas que se mecaniza con facilidad y que puede utilizarse en diferentes maquinarias y procesos industriales.
A esto se le suma que es una fundición más barata que presenta una excelente resistencia a la compresión y que se puede soldar. Esto último se debe a que el carbono que forma parte de su composición está en forma de finas láminas.
Se llama fundición gris porque al fracturarse, su superficie es de color gris.
#3 Fundición nodular
La fundición nodular, fundición dúctil o fundición esferoidal cuenta con excelentes propiedades mecánicas, es así que es un material con buen punto de elasticidad y ductilidad, pero que también es altamente resistente a compresión, impactos y desgaste.
Debido a que en su composición tiene magnesio, el carbono que contiene se cristaliza en forma de nódulos. Este fenómeno no solo hace que sea conocida por su nombre, sino que también es el responsable de sus propiedades.
En cuanto a su soldabilidad, las fundiciones nodulares son soldables con electrodos de níquel.